La candidatura liderada por Yolanda Díaz gana la primera asamblea de Sumar en una consulta marcada por la baja participación. La lista de la vicepresidenta segunda del Gobierno ha logrado este sábado el apoyo del 81,6% de los votos, 6.671. Tan solo 8.179 personas, el 57,6% del censo activo —aquel que se había registrado específicamente para esta cita— han participado en un plebiscito en el que Díaz se jugaba poco, con una lista alternativa desconocida y sin ningún peso. Teniendo en cuenta el número total de inscritos de la plataforma, fijado en unos 70.000, sería únicamente el 11,7% del total. El resultado, anunciado a última hora de la tarde de este sábado en el acto de cierre de la asamblea, culmina así la primera etapa del proceso de construcción de Sumar, que deberá completarse en las próximas semanas y meses con la definición de los protocolos que se establezcan con el resto de fuerzas políticas en cada territorio, hasta ahora principal punto de fricción. El de Sumar será finalmente un proyecto con un desarrollo asimétrico, lo que ha soliviantado a organizaciones como Izquierda Unida y deja abierto el debate hasta la reunión del próximo otoño. Las bases de la nueva plataforma también han ratificado la tesis política de la formación (83,05% de apoyos), un documento que llama a disputar la batalla ideológica a la derecha con el feminismo, el ecologismo y el laborismo como elementos centrales; la ponencia organizativa (82,82%), que establece las bases del modelo de la nueva plataforma; y el código ético (83,90%) de Sumar.
Con estos datos, que incluyen 780 abstenciones y 606 en blanco, la candidatura de Díaz (Sumar Avanza) se hace con 76 puestos de la dirección, mientras que la lista alternativa (Sumar Baleares) consigue cuatro asientos. La elección de este sábado supone únicamente el 70% del grupo de coordinación —máximo órgano de dirección entre asambleas—, y habrá que esperar aún a que el resto de partidos implicados en el proceso —Izquierda Unida, Catalunya en Comú, Verdes Equo, Contigo Navarra e Iniciativa del Pueblo Andaluz— designen a sus representantes para ocupar el 30% restante. Será después cuando ese grupo elija a la Ejecutiva y refrende a la coordinadora de Sumar, aunque informalmente Díaz ya ha sido proclamada este sábado.
Frente al número de inscritos que ha votado en la consulta de la titular de Trabajo, más de 30.800 militantes participaron en la votación que ratificó el pasado noviembre la hoja de ruta de Podemos y defendía reforzar la autonomía de la organización respecto a Sumar, mientras que en las últimas primarias de IU para elegir a su candidato a las europeas intervinieron 7.245 militantes.
La lista de la vicepresidenta segunda del Gobierno refrenda al núcleo de confianza y el grueso de la dirección provisional, con el ministro de Cultura y portavoz de la formación, Ernest Urtasun, como número dos y el portavoz parlamentario, Íñigo Errejón, en el cuarto puesto. Paula Moreno, economista encargada junto al diputado Lander Martínez de elaborar el documento organizativo, aparece tercera. Otros perfiles próximos a la vicepresidenta, como su jefe de gabinete político, Josep Vendrell, tienen también un sitio entre los primeros huecos de la papeleta.
La primera asamblea de Sumar llega en un momento complicado para el socio minoritario de la coalición, que ha perdido foco en los últimos meses en medio de un debate público copado por la ley de amnistía —y en el que su papel de apoyo no ha sido entendido por toda la izquierda— y la crispación política entre PP y PSOE por los casos de corrupción y de la que los de Díaz han tratado de desmarcarse. La convocatoria electoral en Cataluña tras el no de Catalunya en Comú —miembro de Sumar— a aprobar las cuentas de la Generalitat o la renuncia del presidente Pedro Sánchez a negociar los Presupuestos para 2024 complican también la función del grupo de la vicepresidenta en el Ejecutivo, con mayores dificultades para dar salida a la agenda social que reivindican como bandera. “No hemos venido a estar, hemos venido a transformar”, ha proclamado el portavoz parlamentario, Íñigo Errejón, coautor del documento político junto a Marta Lois, ausente de la asamblea por motivos personales.
Después de las enmiendas incorporadas al documento organizativo, la vicepresidenta ha cedido poder a las fuerzas en los territorios (que tendrán que decidir a la dirección de su órgano “por consenso de todas las partes” o someterlo a votación), pero mantiene el control de la Ejecutiva estatal. En las últimas horas, sin embargo, el anuncio de un acuerdo bilateral entre Sumar y Más Madrid que supone de facto la renuncia de la nueva formación a desarrollar una estructura propia en la comunidad —se trabajará en órganos conjuntos— ha desatado la ira de otros actores relevantes en la región, como Izquierda Unida, de naturaleza federal y fuerza mayoritaria en ayuntamientos como Rivas, uno de sus bastiones históricos. “De ser cierta esa tesis, habrían roto con nosotros”, ha advertido este sábado el coordinador de IU Madrid, Álvaro Aguilera, en el mismo recinto de la asamblea en un clima de tensión entre organizaciones. En un mensaje en clave interna, la ministra de Juventud e Infancia, también candidata a la coordinación de IU, Sira Rego, ha defendido la construcción de un “espacio plural”, donde todas estén “cómodas, con los mismos derechos y en pie de igualdad “. “Todo ello lo hacemos desde el afecto político, pero desde nuestra autonomía y desde nuestra raíz”, ha añadido. El partido de Díaz ha especificado también que no se desarrollará orgánicamente en Cataluña, donde se sienten representados ya por los comunes.
“Con esta asamblea, Sumar llega a su mayoría de edad. Más fuerte, más organizada, con las ideas claras y dispuesta para afrontar los retos que tenemos por delante como país”, proclamó por la mañana el portavoz de la formación, Ernest Urtasun, en la apertura de la asamblea. En su breve discurso, el portavoz llamó a construir organización en un momento que nada tiene que ver ya con la ola movilizadora impulsada tras el 15-M y en el que surgió Podemos. De forma velada, el ministro también se refirió a la fuerza política fundada por Pablo Iglesias. “No hemos venido a repetir los pasos de nadie”, sentenció en alusión también a evitar los errores cometidos por esta.