Las elecciones en el País Vasco se resolvieron con un empate de escaños entre PNV y EH Bildu. La coalición abertzale logró su mejor resultado, pero los primeros se mantuvieron como la fuerza más votada. A continuación, repasamos los datos más útiles para entender el resultado de estos comicios.

1. El PNV gobernará, probablemente, con ayuda del PSE-EE

Hay dos vías fáciles para alcanzar la mayoría de 38 escaños y ganar la investidura. Por un lado, PNV (27 escaños) y EH Bildu (27) superan esa cota con holgura. Pero el PNV tiene una alternativa al acuerdo nacionalista, que es apoyarse en los socialistas del PSE-EE (12), como ya hicieran en 2020. Ese acuerdo parece el más probable.

2. El PNV se mantiene primero

Una clave de la noche es que el PNV ha resistido como el partido más votado, igual que en todas las elecciones vascas en democracia. Supera a EH Bildu en casi tres puntos, aunque pierde cuatro desde 2020 y cae en casi todos los municipios.

3. EH Bildu logra su mejor resultado

La coalición abertzale pasa del 27,9% de 2020 al 32,5% de este domingo. Sus apoyos doblan o triplican los que lograron las formaciones de su mismo espacio hasta 2009, antes del fin de ETA.

Es la primera vez que EH Bildu (que concurre desde 2012) gana en votos en dos de las tres provincias vascas. El PNV se impone en Bizkaia, con diez puntos de ventaja sobre Bildu, la menor diferencia desde 2012. Allí los nacionalistas sacan los votos que les sirven para imponerse a EH Bildu en el total del País Vasco, pero dada la peor conversión de esas papeletas en escaños —respecto a Gipuzkoa y Álava—, las dos fuerzas acaban empatadas en escaños.

4. EH Bildu creció sobre todo con votos de Unidas Podemos

En cuatro años, la formación abertzale ha sumado 4,6 puntos. Casi un tercio de los votantes de la coalición morada en 2020 habrían votado ahora por EH Bildu, según los datos de la última encuesta preelectoral de 40dB. Los abertzales de izquierdas también recogieron exvotantes del PNV (9%) y del PSE-EE (4%).

EH Bildu ha sido más fuerte en municipios pequeños, como ya pasó en 2020. Pero su crecimiento ha sido transversal: ha crecido alrededor de cinco puntos en localidades de menos de 1.000 habitantes y también en las grandes ciudades.

5. El espacio de Unidas Podemos se reduce hasta niveles de antes de su nacimiento

En las generales de 2015, los partidos nacionales a la izquierda del PSOE, por entonces IU y Podemos, lograron un histórico 29% de los votos. En 2016, ya en coalición, fueron la fuerza más votada. Sin embargo, apenas ocho años después, su fuerza —ahora representada por Podemos y Sumar— se ha reducido casi a la quinta parte.

6. Los nacionalistas en récord, no el nacionalismo

La suma de PNV y EH Bildu logró el 67,7% de los votos, mejorando ligeramente su cifra de 2020, que ya fue la mejor de toda la serie histórica.

Sin embargo, este avance de los partidos nacionalistas no se acompaña de un avance del nacionalismo ni del independentismo. Según la encuesta preelectoral del CIS, un 46% de los entrevistados se siente solamente vasco o más vasco que español, una cifra inferior al 54% de 2015 o el 57% de 1998. También ha retrocedido el apoyo a la independencia. Según un estudio que publica la Universidad de Deusto, hoy solo un 13% de los vascos prefiere un Estado independiente, frente al 18% de 2015.

7. Las encuestas estuvieron bien

En nuestro promedio de encuestas, las mayores desviaciones han sido para EH Bildu y el PSE con uno o dos escaños. PNV y PP estuvieron muy cerca de la predicción central, y entraron Sumar y Vox, que tenían más probabilidades que Podemos. También resultó útil nuestra predicción probabilística: el sábado avisamos de que el primer puesto estaba en disputa, y que EH Bildu podía no lograrlo, como ha ocurrido.

_

Compartir
Exit mobile version