La Policía Nacional detuvo este domingo por la tarde en el municipio sevillano de Montellano a un joven nacido en 2007 y de nacionalidad siria en el transcurso de una operación contra el yihadismo que continúa abierta, según confirman fuentes cercanas a la investigación a EL PAÍS. En la vivienda en la que residía el menor, de 16 años, se encontró material explosivo.
La localidad, de apenas 7000 habitantes, vivió en la tarde del domingo momentos de caos cuando sus vecinos vieron el despliegue del operativo de los agentes que cortaron varias calles del centro. El nerviosismo obligó al Ayuntamiento a emitir un comunicado por redes sociales llamando a la calma y trasladando que la Policía Nacional les había informado de que no existía “riesgo alguno para la población”, si bien la investigación seguiría “en las próximas horas”, por lo que se hacía “una llamada a la tranquilidad”.
Fuentes del Consistorio indican a este diario que tras las horas convulsas vividas ayer desde que se inició el despliegue policial alrededor de las cuatro de la tarde del domingo, el municipio, situado en el extremo sur de la campiña sevillana, se ha despertado “con total normalidad”.
Las fuentes de la investigación piden cautela y desmienten una de las versiones que circulan por el municipio de que fuera la madre del joven la que alertó a las autoridades. “La operación sigue abierta y podría haber más detenciones o ramificaciones”, señalan los interlocutores consultados.
El alcalde del municipio, Curro Gil, ha confirmado que el joven detenido vivía con su madre y una hermana pequeña. Era una familia de refugiados sirios perfectamente integrada en el municipio al que habían llegado hace unos dos años. Las clases en el instituto al que acudía el menor no se han suspendido y de hecho el director trasladó ayer a las familias que la jornada escolar iba a transcurrir con normalidad, ha señalado el regidor, si bien es cierto, que muchos chavales no han acudido hoy al centro.
Son ya varios los jóvenes los que en los últimos meses han sido detectados por las fuerzas y cuerpos de seguridad de Estado por haber caído en las redes del yihadismo. Seis desde noviembre de 2023, contando con esta última detención en Montellano, informa Óscar López-Fonseca. Ese mes, fueron detenidos dos adolescentes en Palma de Mallorca y Plasencia (Cáceres) por difundir proclamas radicales islamistas en canales de videojuegos frecuentados por jóvenes. El pasado lunes, a otros tres menores, (dos en la provincia de Madrid y otro en Barcelona) se les intervino manuales para elaborar Triperóxido de Triacetona (TATP), un potente explosivo de fabricación casera conocido como madre de Satán. Antes, en septiembre del año pasado, la Guardia Civil detuvo en Vitoria a una mujer de nacionalidad española por adoctrinar a sus cuatro en la ideología del terrorismo yihadista. En 2022, sin embargo, solo hubo un menor de edad detenido por estos delitos.
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