Parece que la noticia se repite una y otra vez, con ligeras variaciones en el titular, desde finales de 2023, cuando fue acusado de violación por primera vez. Desde entonces, Sean Combs, rapero y magnate de la industria musical más conocido como Puff Diddy, no ha cesado de recibir demandas de distinta índole. La última, de una antigua estrella del mundo del porno.

Entre las muchas denuncias que acumula ya por violaciones, abusos físicos, abusos a menores o agresiones sexuales, hay una acusación repetida que hizo que los agentes federales registrasen sus mansiones: la de tráfico sexual, que es precisamente de lo que le ha acusado de nuevo Adria English, quien afirma que su nombre artístico en la pornografía era Omunique.

Ella afirma que conoció a Diddy en 2004, cuando su novio estaba haciendo un cásting de modelos para la firma Sean John. En los documentos, obtenidos por el portal de noticias TMZ, Adria comienza explicando que a su novio y a otra modelo se les pidió que le practicaran sexo oral a Diddy para conseguir el trabajo.

Detalla cómo su novio se negó, si bien hubo una segunda oportunidad para él gracias a uno de los socios de Diddy, quien le ofreció el trabajo siempre y cuando Adria trabajase como «bailarina gogó» en la próxima fiesta que el productor musical iba a dar en los Hamptons, una conocida y exclusiva zona del estado de Nueva York.

Tras estudiar la propuesta, cuenta Adria, ella y su novio estuvieron de acuerdo, y trabajó en la fiesta durante el fin de semana del Labor Day, el primer lunes de septiembre, de 2004, incluyendo la demanda fotografías que certifican que estuvo allí. Asimismo, agrega la exactriz de contenido para adultos, trabajó en otras fiestas de Diddy.

En estas, reconoce, tenía que beber alcohol mezclado con drogas, normalmente éxtasis, haciendo que coquetease con los invitados sin llegar a nada más. Sin embargo, Adria explica en la demanda que Diddy la fue «preparando» para ser parte de su trata de mujeres, exigiéndole en un momento dado que mantuviese relaciones sexuales con Jacob Arabov, conocido como ‘Jacob the Jeweler’ en el rap.

Los abogados de Adria señalan que estas fueron «relaciones sexuales forzadas» y que, como luego le pagaron 1.000 dólares más de lo que normalmente recibía por trabajar en las fiestas, se puede considerar tráfico sexual, ya que hubo de hacerse una fotografía con Jacob tras la agresión —él también aparece como acusado en la demanda—, así como Diddy la felicitó personalmente por su buen trabajo. 

Eso fue solo el principio, ya que Adria ha explicado que le «hicieron pasar de una persona a otra» en las fiestas, siendo varias veces agredida sexualmente casi sin posibilidad de salir de ese mundo por dependencia económica.

Además, también está demandando a una mujer llamada Tamiko Thomas, a quien acusa de facilitar las operaciones de tráfico sexual de Diddy, llamándola «la Ghislaine Maxwell de Diddy», refiriéndose a la mano derecha del magnate y líder de una red de trata sexual de menores Jeffrey Epstein.

Por último, termina afirmando que Diddy les prometió a ella y a su novio escalar en sus carreras, asegurándole a ella que entraría en una girl band para pasar al mundo de la música, pero que todo fue mentira, amenazándoles y chantajeándoles con lo contrario si no cumplían, algo que ocurrió en 2009, cuando la pareja regresó a California y fueron excluidos de casi cualquier trabajo como castigo.

Adria English pide una cantidad de dinero no especificada por daños y perjuicios, entre los que se incluyen traumas emocionales, como problemas de intimidad y recuerdos dolorosos, debido al tráfico sexual al que fue sometida.

El abogado del rapero, Jonathan Davis, le ha dicho a TMZ: «Da lo mismo cuántas demandas presenten, eso no va a cambiar el hecho de que el Sr. Combs nunca ha agredido ni ha traficado sexualmente con nadie. Vivimos en un mundo donde cualquiera puede presentar una demanda por cualquier motivo y sin ninguna prueba. Pero, afortunadamente, existe un proceso judicial justo e imparcial».

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